El
de ayer era un partido clave por cuanto ganar significaba mantener la
diferencia con el eterno cafiche, el que para variar había ejercido su alcahuetería
en el sur. Además, el pleito serviría para ver en acción a Benjamín Vidal y al
uruguayo Guzmán Pereira, sobre quien existían muchas expectativas debido a que,
cada vez que ingresaba, aportaba con pierna fuerte y entrega segura del balón.
Desgraciadamente, el charrúa defraudó: se vio perdido, falló en casi todas las
habilitaciones e incluso dio la impresión de que no fue capaz de resistir la
velocidad del juego, causó que Gonzalo Espinoza se extrañara demasiado y
sobrecargó la tarea del excelente Sebastián Martínez. Ahora bien, no por eso se
le condenará para siempre, recordemos el debut horrible de Cristian Traverso o
las inseguridades de un joven Marcelo Díaz, ¿en qué se convirtieron
posteriormente?: en deportistas insustituibles. El uruguayo necesita tiempo porque
viene de un club acostumbrado a especular.
El
primer lapso fue muy delicado, con una U que sólo apareció a ráfagas y a la que
le llegaban con mucha facilidad tras perder todos los rebotes y las segundas
pelotas en el mediocampo. El tema de los cabezazos en contra ya es insoportable:
como ya hemos afirmado, se fue Marcos González y ese factor jamás se solucionó.
San Marcos, en tanto, golpeaba impunemente, de hecho casi liquidan a Gustavo
Canales, y el árbitro Cristian Andaúr enseñaba al respecto una laxitud
desesperante. La oncena nortina, además, contraatacaba masivamente y daba la
impresión de que en cualquier momento lograría ponerse en ventaja, aprovechando
el desbarajuste azul.
Por
suerte, Martín Lasarte es un DT sensato y determinó el ingreso del jugador más inteligente
que posee la U en
la mitad de cancha: Gustavo Lorenzetti. Él solo dirigió la fase creativa del
equipo en el segundo tiempo y así se terminaron los nudos y las estupideces. La
gran lección, por lo tanto, es que de no estar Gonzalo Espinoza, la presencia
de Lorenzetti es una obligación. Y no sólo eso, Ramón Fernández no puede ser
titular, pues no se muestra, retarda los contragolpes, cuando tiene que habilitar
a los punteros remata al arco y mal, y cuando tiene que rematar al arco habilita
a los punteros y mal. Esta es la gran oportunidad para jugadores como Joao
Ortiz y Bryan Cortés, pues cualquiera de los dos está en condiciones de ayudar
a Martínez en el equilibrio de la zona media y a la vez apoyar a Lorenzetti en
la creación. Veremos qué decide el cuerpo técnico.
Benjamín
Vidal cumplió, tiene pierna fuerte y es rápido. Un buen refuerzo que, tras la
lesión de Osvaldo González, puede resultar clave. Lo mismo podemos decir de
Matías Corujo, excelente incorporación y ayer metió el trancazo sin pudor
cuando fue necesario.
Las
jugadas polémicas fueron las siguientes:
- El jugador que le
lanza un rodillazo en la cara a Canales, luego del foul que generó la
luxación de su hombro, debió ser expulsado.
- Efectivamente, hubo
mano de Martínez en el remate que da en el horizontal de Herrera, pero el
tiro fue demasiado potente y por eso Andaúr no vio la infracción.
- Mientras los
payasos del CDF insisten en que no hubo falta sobre Lorenzetti en el tiro
libre que causó la ridícula expulsión del arquero rival, para los
comentaristas argentinos del FOX la infracción fue alevosa, por atrás y
merecía tarjeta. En el colmo de la indecencia, nuestros vulgares
periodistas aseguraron que el volante azul había pisado la pelota y que
por eso había caído, cosa que nunca ocurrió. Flagrante mentira de estas
marionetas indeseables.
- Para estos mismos caraduras,
el penal que termina desperdiciando Canales tampoco era falta, a pesar de
que se observa claramente que el defensa ariqueño golpea el talón de
Ubilla cuando éste ya se lo había sacado.
En
resumen, el partido se volvió difícil por los continuos yerros en la zona media;
San Marcos demostró ser muy veloz en ofensiva pero, por suerte, carente de
finiquito y de una condición física estable; después del golpe en el hombro,
Canales jugó incómodo pero igual fue determinante en el segundo gol, aunque
deberá enmendar la fanfarronería que cometió en el penal; la solución al
problema táctico de los primeros 45 minutos llegó desde la banca, con un certero
Lasarte y un iluminado Gustavo Lorenzetti, quien demostró estar varios peldaños
más arriba que Fernández porque toca y profundiza de primera, precisamente
aquello fue el principal agente del triunfo; Ubilla y Rubio cumplieron, pues al
menos estuvieron muy movedizos y siempre fueron opción de descarga; y, aunque
parezca surrealista, hasta César Cortés aportó lo suyo, aunque hayan sido
chiripazos.
Ahora
nos preguntamos si después de la lesión de Canales será correcto que la
dirigencia azul lo envíe al matadero que lidera Sampaoli, teniendo en cuenta
que el próximo partido es contra el eterno cafiche. Creemos que no sería
juicioso.
La presencia de Fernández en cancha provoca que los delanteros deban bajar a buscar la pelota ya que no les mete buenos pelotazos, fundamentalmente por que no tiene visión periférica como un 10 de categoría requiere, además no le da ritmo al medio por que es lento y no tiene toque de primera, y mas encima para cagarla aún mas, la única virtud que tenía que era el remate al arco, se le extravió hace rato. Por tanto, Lorezetti debe ser titular el próximo encuentro y de ahí en adelante. Punto final.
ResponderEliminarEl nivel y la entrega de Martinez es extraordinaria, mas aun si consideramos su corta edad y está llamado a convertirse en todo un símbolo azul.
Finalmente, me gustó el partido de Rubio que además de marcar los dos goles demostró entrega, ganas y aparecer justo cuando Canales no estaba en su mejor día.
Vamos la U!!!
Algo que hemos venido declarando desde el inicio de este nuevo proceso, es la convicción de que deben hacerse todos los esfuerzos necesarios y tomar las medidas que correspondan para conseguir mantener por largo tiempo en su cargo al actual cuerpo técnico. Al margen de los resultados, que ya son bastante satisfactorios, es de suma importancia contar con gente educada, de primer nivel profesional. Características que sin espacio a dudas poseen Martín Lasarte y su equipo de trabajo. No se debe caer por ningún motivo en la chulería propia del eterno truhán. Los títulos arriban producto del trabajo serio e inteligente y no deben convertirse en una obsesión maquiavélica pues de esa manera, se desciende hacia una categoría procaz inherente al siguiente rival de turno. Es de esperar que la nueva directiva sea capaz de validar una visión estratégica consistente, para lo cual insisto, es primordial generar las condiciones adecuadas y necesarias para asegurar por largo tiempo el mando del actual director técnico.
ResponderEliminarEl día 19 de octubre, nos veremos enfrentados nuevamente al fullero y hostil ambiente del Arena Pinochet. Esperemos que la conducción de nuestro sagaz DT extraiga las principales virtudes de sus pupilos y consigamos estirar a ocho puntos la distancia de la pestilencia.
¡Viva la U!
Me parecio que el deslucido primer tiempo tambien se vio condicionado por un equipo como Arica que se viene a jugar la vida y abuso del juego brusco.
ResponderEliminarFueron innumerables las patadas de Coronado y el Central Ariqueño; que ademas pegaban de una manera tan ostentosa, que asombraba ver al arbitro dejar seguir sin alguna amonestación.
Caso aparte el Arquero Carrizo que al no quedar seleccionado en algún reality de Segunda, se jugo la vida por aparecer en la transmisión televisiva de un Partido de la Universidad de Chile; cada vez haciendo aspavientos vulgares y gestos propios de un "Roba Cámara" Dio la nota folckorica del partido...Ja Ja Ja.
Esta semana la U debe trabajar en detalles del partido contra el regalón de pinocho y asi demostrar que esta estadística ridícula de no ganar en ese hoy, es meramente la síntesis de robos y artilugios de la maquinaria cuma.
GRANDE LA U VALIENTE Y COMBATIVA!!!